Reflexión sobre las Culpas

Desde hace mucho tiempo, he tenido que ingeniarmelas para dividir mi tiempo haciendo diferentes cosas pero la mayoria de las veces me salia el tiro por la culata porque habia un factor, no, varios factores que me impedian hacer bien mis asuntos: las culpas.

Con frecuencia me la paso sintiendome culpable por las cosas que hago y las que no logro hacer. Si me preguntan "¿Has cometido alguna locura linda que te haya dejado plena de satisfaccion?", siempre les respondere que "No", ¿Por qué? Porque en mi hay un abismo entre el "Yo quiero, puedo y tengo todo el derecho de hacer tal cosa" y el "Tu debes hacer esto y lo otro", impuesto por mi madre y por la sociedad. Mmm... la sociedad moderna es cada vez mas confusa, por un lado nos dicen que las mujeres debemos casarnos, tener hijos, trabajar y ser arregladas. Pero por el otro, nos critican si no llegamos a tiempo para hacer la cena, si gastamos NUESTRO dinero en "tonterias" (llamese ropa, accesorios, cachivaches, etc...), si se nos ocurre usar maquillaje dicen que deseamos irnos a prostituir a la esquina, entre otros.

He pasado toda mi vida atormentada por los sentimientos de culpa. Si llego tarde, mi mamá se va a molestar. Si me compro esa blusa que he ambicionado por meses, no me va a quedar plata para mis otras necesidades. Si no salgo a la calle, me van a decir amargada. Si salgo a la calle, me diran libertina. Si me voy a vivir a un departamento, van a decir que soy una irresponsable. Ya ni siquiera puedo hablar como quiero sin que me critiquen por ello, vivir aqui me tiene transtornada y tengo que tragarmelo muy a fuerzas. Aun asi me las ingenio para expresarme a mi gusto, sin que nadie me diga que hacer, ese es sin duda, el sueño dorado para mi.

Ha llegado el momento de poner fin a los sentimientos de culpa. ¡Se acabó! ¡No más! De ahora en adelante me comporto libre y fresca como una lechuga, confiada en que hago las cosas bien. ¡Ya estuvo bueno! ¡De ahora en adelante quedan prohibidas las culpas! Voy a salir tranquila de la casa a pasear cuando me venga en gana; voy a comprar esa blusa que me queda bien y me gusta sin pensar si es caro o no; me voy a quedar en casa si asi me place; voy a aceptar cualquier trabajo que me parezca conveniente y, si quiero quedarme un día hasta más tarde en la casa de una amiga, me voy a quedar feliz. Y si me consigo un departamento, estare tranquila sin que nadie me este moliendo acerca de darle de comer al perico, sacudir los diplomas de mi hermano u hospedar a mi detestable sobrina. Mi vida, mis reglas. Punto.

No se extrañen si me ven por ahi con un corte distinto al de costumbre, usando maquillaje agresivo, mi chaqueta de cuero negra y mi anillo de Vivienne Westwood mientras bebo cafe con leche.