viernes, 6 de noviembre de 2009

Soltera vs Casadas

Aparte de mi mejor amiga Cindy, yo soy la única soltera de entre mis amistades. Supongamos que ella no se mortifica demasiado porque se esfuerza mucho en la universidad y le augura un futuro brillante, pero yo que me la paso escribiendo y tardaré mucho en darme a conocer públicamente, creo que sí llego a pensarme más de una ocasión lo bueno de estar sola... y soltera.

Como mis amigas están casadas o viven con el novio, tienen tiempo nulo para hablarme aunque sea en mi jodido cumpleaños. Además, el hecho de que yo no tenga celular no ayuda mucho para llamarlas yo puesto que la mayoría viven hasta la Patagonia y eso me quita las ganas de irlas a visitar.

Siempre que me invitan a una fiesta, me dan ganas de llorar o de darles un escobazo por llevarme a un lugar al que van puras parejas y yo quedo como "la solterona". Nadie, pero nadie se compadece de mi estatus social y siempre acabo yéndome de esos eventos con una cara más larga que la de la mismísima Llorona, para colmo, SOLA.

Este miércoles me topé con mi amiga Karina en el súper. Ella por supuesto ya está casada y con una hija bien linda llamada Renata. Las dos nos encontrábamos comprando vegetales y después de platicar de lo lindo, salió a la luz un tema que terminó por agriar nuestro dulce encuentro.

"Ay como dan cara la papa aquí" se quejó ella "Y también las cebollas"
"¿En serio? Yo creo que está bien" dije mientras elegía los tomates más buenos antes que ella.
"Para ti es fácil porque estás sola y nomás compras una cebolla, una papa, un tomate, y por eso se te hace barato. Pero cuando estás casada y con hijos, es difícil economizar, ¿no crees?"


Yo me quedé con cara de "WTF?" ¿Desde cuándo una soltera compra la verdura de uno en uno? ¿No es más fácil comprar el kilo entero para ahorrar visitas al supermercado? Además de que la muy lerda olvidó por completo que yo hago comida para la familia entera, no sólo para mí. Como quien dice, estoy condenada al trabajo forzado sin estar casada. El comentario de Karina sí me hizo enojar mucho y contraataqué:

"¿Sola? No mames wey, todos los días viene mi hermano y su familia a comer a mi casa, y aparte es mejor estar soltera que joderse diario con lo cara que está la papa"
"Dices eso porque me tienes envidia. Tú estás hundida en la casa con tu madre y te pierdes de lo bueno de la vida"
"¿Y a ti que te consta mujer? ¡Al menos yo no tengo que estar atendiendo al marido a cada rato como la típica ama de casa! ¿Qué crees que las mujeres nomás nacimos pa' eso? Y si tanto te puede soltar un chinche peso para la comida, deja sin desayunar a Renata y punto." luego voltée a ver a la niña "Te cuidas nena, no seas como la zonza de tu mamá"


Okey, sé que me vi ridícula peleando como vieja de vecindad, pero ya me tenía harta con eso de que me echara en cara mi soltería. A partir de ese momento, Karina avisó al resto de mis amigas casadas de mi actitud de "feminista liberal de mierda" y ahora todas estamos peleadas. A mí me da lo mismo, de cualquier modo puedo conseguirme otras amigas que no me vengan a moler con sus dilemas de mujeres matrimoniadas y me hagan sentir cucaracha.

1 comentario:

Jinete_Enmascarado dijo...

cat fight cat fight, solo falto la lucha en lodo para resolver los problemas entre mujeres como dios manda